La
tarde es un pájaro en busca de la noche,
su
corazón es una flor roja y ciega
que
bombea aeroplanos, paisajes y sentimientos.
Nos
vamos acercando a la oscuridad estrellada,
lentamente,
como barca a su orilla.
Las
ventanas se van quedando sin miradas,
Los
ojos hacia el interior.
Esta
tarde y su manuscrito incomprensible
es
un canto pensativo que jamás ha de retornar,
la
noche y su almohada bordada de barcos y peces
se
hace esperar.
He
aquí el ocaso derritiéndose en mi espejo,
mi
lámpara se encenderá en el momento exacto
que
separa la luz de la tiniebla,
y
alumbrará los interminables caminos
de
todas las tardes que ya jamás han de retornar.
Hermoso, mi querida Adri!
ResponderEliminar:D Gracias mi querida compañera dancística!!! ;)
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