El árbol dormido sueña con las ramas desnudas del cielo,
y de sus raíces profundas brotan estrellas maduras.
El pájaro sueña con el esqueleto del sol
y de sus alas fulminantes surge la chispa que incendia la brizna taciturna.
El tiempo desmenuza las horas en las hojas muertas
mientras los segundos se desvanecen al contacto del pájaro con el viento.
domingo, 19 de julio de 2015
De mi centro brotaron dos lunas idénticas,
ellas retrocedieron lentamente a espaldas del espejo:
Se colgaron menguantes en el cenit de mis sueños.
Di un salto y avancé hacia la eternidad sin fondo,
incomprensible:
Somos modelo a escala de tirantes estrellas lejanas. Es todo lo que podemos hacer,
dar cortos y agraciados saltitos
equilibrarnos en la cuerda floja de nuestro inconsciente; es sólo eso, el resto es historia conocida: Tomar el mismo barco y mirar desde lejos a los extraños habitantes de la isla, que alimentados por la pálida luz de nuestras lunas Nos hacen torpes señas
El tiempo mueve sus dedos fríos para hacer bailar a sus muñecos envejecidos
su férreo movimiento te obliga a dar la espalda al reloj.
"El movimiento fabrica la distancia en su laboratorio geométrico".
Tus sueños son pálidos muñecos que el tiempo maneja
En un escenario de arena que da al mar.
"Las horas se congelan en la superficie fría de nuestros hilos de plata".
¿Logras divisar al infinito deshojando como margaritas el movimiento de tus pensamientos?
¿Ves a las manos del reloj dibujando marionetas en mi espalda?
"Tus hilos cuelgan como frutos maduros de las ramas del tiempo".
Blanca superficie de los días pasados ¡Me abismas!
Todo aquello que tardíamente nos abriga se evapora cuando damos la espalda al espejo.
Un puñado de aves forma una constelación en los cielos de mi infancia,
Siempre se apagan las nubes en mis recuerdos, se hacen invisibles.
Mis manos envejecen al amparo del silencio
Sobre la oscura geografía del tiempo.
Pasado y porvenir ¡Fabulosas estrellas muertas que nos ciegan!
En su intersticio elasticado mi alma canta.