Me conmueve el error,
la pequeña imperfección,
¡Cuánto candor hay en una pequeña falta
involuntaria!
como resbalar,
Caer
Declinar.
¿Quién se conmueve ante la simetría del
árbol que en perfecta disposición
recorta el horizonte?
Seamos francos
la perfección nos sorprende,
nos hipnotiza,
Pero ante el desprendimiento de una hoja
o frente a un árbol desnudo,
nos conmovemos como infantes,
Pues en la falta se configura el origen
de toda redención.
Irremediablemente, mis ojos atrapan la
candidez de una falla.
En el acto siempre hay error,
Un gesto involuntario
Una palabra mal escrita o pronunciada,
yo me conmuevo:
Amo la imperfección, siempre tan redonda
que quiebra el mundo absoluto de la perfección.