viernes, 30 de diciembre de 2011

Delicada



Soy delicada como la  arena que viaja hacia un mar distante,
Como la orilla de un beso en la memoria más antigua,
De seda en los párpados,
Delicada como velo blanco ocultando un espejo de caoba.
Adoro deslizarme en las texturas que reemplazan al sol
Abrir las persianas con los ojos cerrados
y percibir el cambio de la luz en la piel,
Me aferro al placer del susurro distante
De la palabra que viaja luminosa y se instala en lo más oscuro del corazón,
Soy delicada como nieve nocturna;
Como hoja de abedul que cae sin deseos de caer,
Soy delicada, pero no te confundas
Mis huesos son fuertes como rocas,
Soy terca,
Porfiada como el reloj que se detiene,
Cuando me voy rara vez regreso
Y como las gatas siempre caigo de pie.

lunes, 26 de diciembre de 2011

Amor a primera vista



La sensación es anterior al cuerpo,
El movimiento preciso entre dos conciencias:
El milagro de la mutua percepción,
La certeza de que la experiencia es anterior al contacto,
El cosmos que surge del conocimiento profundo y te anuncia que empiezas
A existir en otra conciencia, como si nunca antes hubieras existido.

viernes, 23 de diciembre de 2011

La lámpara se irrita con la mano que la enciende


La lámpara se irrita con la mano que la enciende,
así como la luna se irrita con el espejo que la refleja;
vas cruzando
vas cruzando el hastío,
pero sabes que no es hora de ahogarte,
las palabras no son más que piedras soñolientas
sino surgen de la sombra para alumbrar,
la mañana declina,
la tarde se olvida,
la noche nos deja a oscuras;
entonces ¿por qué no aferrarnos a las palabras que tardíamente se encienden?
¡Cómo deseo la luz en tus manos!
no te enfades por ello,
la lámpara se irrita con la mano que la enciende,
¿pero que otra cosa puede hacer ella sino alumbrar?

jueves, 22 de diciembre de 2011

¿Cuál es el punto de luz que da origen al círculo?



Envuelta en una sábana de luz anda la luna por el desierto,
Nada por el polvo luminoso,
Sonríe,
Descansa de la altura,
Le enseña a alumbrar a las piedrecitas blancas;
Su luminosidad me traspasa, me indica el camino
Cuídate del cielo-me susurra,
No te eleves hacia los párpados del cenit,
¡baila conmigo!
Desordenemos la noche del desierto al ritmo de los tambores,
Instemos a  la profundidad en nuestra espaciosa pista de baile
Tocamos la oscuridad y su fulgor con los pies salpicados de polvo
Más no dejamos huellas,
Nada habrá de quedar de esta danza al amanecer,
¡Danza lamparita de agua!
¡danza con tus pies que interrogan!
Mi piel bebe toda la luz que es como un aire,
Me aclaro,
Me aclaro,
Retorno a mi interior envuelta en la claridad,
Llamo, busco e interrogo
¿cuál es el principio de las velas,
De las naranjas,
De los espejos,
De la lluvia,
Del manantial,
Del deseo,
Del sueño,
Del sauce que llora?
¿Cuál es el punto de luz que da origen al círculo?
¿Por donde habrá de retornar la semilla?




lunes, 19 de diciembre de 2011

Preguntas



Sueño con un jardín de violetas cubiertas por un velo blanco,
Le pregunto al sol ¿a qué cubrir la belleza?
sueño con una colina pintada de rojo
le pregunto a la fuente ¿a que maquillar la altura?
Sueño con un puente invisible que se corta
Le pregunto a la luz ¿a qué llorar lo de siempre?
Sueño con una carreta cargada de sueños
Le pregunto a Dios ¿a qué escudriñar el misterio?
Sueño que el mar se despierta y  me pregunta:
¿A qué humedecer los sueños si puedes sumergirte?

sábado, 17 de diciembre de 2011

Vence al sol



Aliosha no debes tocar el sol, pues él te quema las manos,
Asciendes muy alto en tu ansia de energía originaria,
Así no puedo alcanzarte.
Que sencillo y dramático es el amor mi adorado Aliosha,
Descíframe,
Derrámame
Aguárdame
Vence al sol.

viernes, 16 de diciembre de 2011

Versos del mar



Me sumerjo en lo más profundo del mar
Soy una corriente luminosa como un misterioso espejo:
He de llegar hasta ti, tuyo es mi secreto,
Pero debes abrir los ojos
No contradigas los faroles que se encienden y disponen.
Eres una estrella de mar taciturna ¡tuya es la inmensidad de la hondura!
Dale forma a la aurora, reconstruye el jardín del mar,
Enciende la lámpara del útero del mundo
¡abre tus silenciosos ojos!

Precognición


Hace años, 
meses,
días,
una noche,
siendo yo muy niña,
la mano de mi madre,
el mar,
las luces lejanas,
El tintineo del brillo,
una arruga en mi falda,
 una sensación inaudita,
Imprecisa,
Casi líquida,
La precognición clara de un refugio distante,
Un otro espacio, sin banderas,
Una tímida lumbre en mi memoria.
Yo era una callecita apartada,
 una mente sin recuerdos,
Pero con la clara certeza de que había otro
                                       que en una misma extraña circunstancia
                                                               en ese mismo instante también me presentía.

jueves, 15 de diciembre de 2011

Sombras en el desierto



Aliosha Karamasov ¡como hay sombras hoy en el desierto!
Ellas se inclinan en el pozo de los deseos y me invocan,
¡que desazón, qué camino inútil sombras que he olvidado!
Tendida en la arena he de levantarme sin mirar hacia atrás,
Querido Aliosha, sé que tú también has llorado de colmado hastío,
¿Qué hemos de hacer con las sombras?
¿A dónde hemos de ir ahora que abrimos las puertas de los astros luminosos?
Aliosha derriba las sombras que hacen de mi una estatua blanca,
Anhelo los espacios claros del amor,
La madrugada que contiene toda la vida,
No quiero ser el espejo de un anhelo que es como un palco,
Aliosha he de encender todas las luces del cosmos
¿pero quién ha de señalarme la vida en carne y no en altar?

Secreto



Tu gran secreto es que en las noches en las que te desvelas, enciendes y apagas una linterna con la certeza de que alguien en lo más profundo de la noche advierte tu gesto, y te envía una señal de la que eres dueña como si fuera tu propio sueño.

miércoles, 14 de diciembre de 2011

Quiero ser la poesía



¿Quién soy yo para encender la lámpara de la palabra?
Sólo intento hacer brillar la mesa, la ventana opaca, la silla vacía,
La arena que acorta la distancia,
Nada más,
no me llamen poeta,
No ha de servirme este adjetivo:
Amo las palabras porque me hacen caminar 
sobre la vereda del mar 
En caminos relucientes que convergen siempre en un sol originario.
Canciones mías ¡alumbren! ¡Háganse esclavas de la luz!
Pero no me hagáis poeta,
Los adjetivos que cuelgan carteles en mi cuello
 Son sólo espectros para la luz que buscan mis ojos,
¡Yo quiero ser la poesía no el poeta!

martes, 13 de diciembre de 2011

La sombra



Recortas la sombra del muro
La pegas en tu jardín,
Siembras sobre ella,
La riegas,
Oyes las campanas lejanas y te sientas a esperar,
La vida detenida comienza andar,
La sombra ya no es sombra: es el hombre
Y comprende que el rumor de hojas en el bosque de bambú
Se ha silenciado,
Y que el fruto verde ha comenzado a madurar
Como las primeras letras de un escrito irrenunciable.

lunes, 12 de diciembre de 2011

Buscar, preguntar…



Pasan los días lo mismo que ojear un libro de poemas,
Vuelan las partículas de arena por el desierto luminoso,
Pequeños espejos atrapando la luz del sol adormecido.
Este es el canto de una mujer que busca,
Que pregunta al camino, a los ríos, al balcón del mar.
preguntar... buscar ¿no es acaso lo mismo?
Un poema, una canción, una canción, un poema
Un puñado de cerezas para encender la tarde que muere,
¿qué otra cosa podríamos hacer? Es todo lo que somos.
Este es el canto de los ojos que como pájaros alzan el vuelo:
La práctica del abrazo hacia adentro,
¿qué puede hacer uno sino encender la palabra, plantar semillas y danzar en compañía de la luna?
Tal vez quitarse el carmesí de los labios e ir en busca de unos pasos perdidos,
¿Acaso preguntar y buscar no es lo mismo?

domingo, 11 de diciembre de 2011

Cuaderno de arena



Escribo al amanecer en mi cuaderno de arena:
Cuando los recuerdos dejen de ser la lluvia,
Y el sol nos conduzca hacia un jardín secreto,
El destino trazado como línea en la arena
Se dispersará en millares de partículas de polvo,
Y el mago murmurará:
No te pierdes, te enredas en tu humanidad
Como en hilos invisibles,
El titiritero no guía estos hilos
Sólo los escribe en la arena.

sábado, 10 de diciembre de 2011

Llamas



Llamas en la noche,
Llamas en la mitad del sueño que no logro recordar,
Llamas en silencio,
A gritos,
Desde que tengo memoria llamas,
Desordenas el cosmos con tu llamado,
Recorres muros,
Desiertos,
Océanos,
Caminos,
Y llamas, llamas,
Le robas el canto a los ríos para llamar,
Te apropias del golpe de las mareas,
Me llamas como un furioso despertador de almas;
Hasta que mi centro dormido se despierta
Y tal como si fuera una golondrina en el despertar de la primavera
Busco el murmullo insistente de tu llamado milenario.

viernes, 9 de diciembre de 2011


Delante de la cama, la luz de la Luna brillante,
creí que era escarcha sobre la tierra.
Levanté la cabeza, vi la Luna brillante,
bajé la cabeza, y pensé en el hogar lejano.


(Li Po, Pensamiento nocturno)


jueves, 8 de diciembre de 2011

Batalla



Cuando expulsas tu voz en el pozo de la noche
Ella libera una batalla con la oscuridad:
Se siente extranjera entre sombras
al mismo tiempo que un remotísimo placer de oscuridad le alcanza;
Finalmente en un palpitante movimiento circular
la voz retorna como soldado herido a lo más recóndito de tu interior.

Potencia



¿Acaso se esconden las flores en el desierto?
No, ellas duermen en las profundices de la tierra
Ensimismadas como si estuvieran en una habitación de ciegos.
El cielo se deslumbra mirándose en el espejo de la belleza en potencia,
Mis músculos se arquean con esta visión,
Me estiro como gata en la arena ante el magnetismo del verdor que vendrá
¡qué ligero está el día!
Golpeo las puertas de todas las semillas
Y llamo a la vida desde la profundidad
Me hundo
               En el florecimiento interno
                                                        de estas tierras.

martes, 6 de diciembre de 2011

Sentido mágico

Te miras en una fuente circular
Recorres con tus dedos su borde de mármol,
Los últimos frutos de la primavera se reflejan en el agua,
El verano se aproxima
El sol va envejeciendo,
El sentido mágico de la vida es el eterno retorno a la semilla,
No hay frontera entre el principio y el final,
¿Comienzas o terminas?
Desembocas en el mar y de pronto eres río nuevamente
¡Desconcertante!
Cálido como los sueños tu dedo recorre la figura circular del borde de la fuente

lunes, 5 de diciembre de 2011

El desierto profundo es tu alma


Una piedra amarilla me despierta,
Abro los ojos y le pregunto:
¿Qué es el uno mismo en el desierto?

Esta clara geografía eres tú
El milagro increíble de tu alma de agua y fuego
El ser  siempre ha de permanecer en esta tierra sin espacio,
Sobran murallas, ruinas y torres en el mundo
Pero faltan caminos de arena brillante
La ciudad lo sabe por eso se lamenta
Su corazón ya no quiere ser una pesadilla de infancia

Y sintiéndome dueña de la ciudad comienzo a recorrer sus calles
Cuyos habitantes no advierten que el sol es un espejo tras la lluvia,
Sigo las huellas de las palabras que embellecen los carteles luminosos,
Tomo la mano de la sombra que me acompaña siempre
Y comprendo que no hay razón para ocultarse:
No importa que la muerte se confunda, que la lluvia moje los zapatos,
Que las lunas de la adolescencia no regresen,
Desde hoy mi corazón late amarillo y la arena suave y dorada reviste mi interior
ahogando el paso de tantos barcos, trenes y llamas que no han de retornar.

domingo, 4 de diciembre de 2011

viernes, 2 de diciembre de 2011

El origen del amor


El amor se inicia breve, leve, como una luciérnaga asustada en el desierto,
se origina antes del sueño, elemental y primario como un huevo,
lento como la sombra de un árbol milenario.
Se origina y entonces nos sorprende, nos inquieta
 nos abre los ojos
de la misma manera como el niño que por primera vez contempla el mar
y extiende sus brazos para abrazarlo
sin comprender aún lo que es la eternidad.

La corona de Ariadna se enciende en el desierto



En la noche sin espacio del desierto la corona de Ariadna se enciende,
Recuerdos gloriosos se desprenden de la arena y ascienden hacia la luz,
Cómo toda extensión circular de la claridad el esplendor de la corona
Se busca a sí mismo,
Has que brille un momento- dice Ariadna
Apoya tu cabeza en mis rodillas y entremos en la resplandeciente oscuridad del desierto
La noche no morirá esta noche, el viento sinuoso y tibio alargará el paso de las arenas en el recipiente del reloj,
A través de las horas, Ariadna reposa en una sensación sin nostalgia, sin ansia arremolinada,
El aliento del desierto sale expulsado por la puerta cósmica en busca de nuevos presagios,
 puede sentir una mano alargada de un amante que no puede ver,
Dedos y palma que son escupidos desde sus mismas entrañas,
Esta mano invisible la corona.