viernes, 23 de noviembre de 2018

Wuthering Heights


Señorita Emily Bronte 
usted vigila desde su cama las sombras que cruzan los espejos,
Sabe bien que la luz que buscan sus fantasmas no regresará,
sólo ha de retornar la oscuridad perdida en el armario de una mansa soledad,
Hethcliff y Katherine hojean las páginas de un peligroso abismo.

No hay amor eterno, 

sólo existe la tarde gris deshojándose en el trapecio de la oscuridad. 

El viento le persigue, mientras usted 
intenta huir de sus deseos literarios,
el cielo se apaga para que las estrellas se enciendan en sus sueños.
Cumbres borrascosas se cansó de representar la pulida tragedia de un amor de papel.
Hethcliff es un títere en manos de su dios gitano.

No hay amor eterno, 

sólo existe un signo indescifrable clavado en el árbol de las palabras.

Desde su interior avanza el viento y muere cansado en las cumbres, 

el  carruaje de las horas se aleja llevando un oscuro personaje que sueña con una morada,
¿acaso es usted?
él piensa: el fin del mundo comienza en esta historia extraña.. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario